Ayer domingo el Presidente del PP, Mariano Rajoy, desvelaba algunos de sus “ocultos planes” en el caso de llegar a la Moncloa. Para algunos no son sorpresas sus declaraciones, porque sabemos fehacientemente que son sólo una pequeña parte de las retrogradas ideas que quieren poner en marcha en nuestro país.
Claro nos dimos cuenta que la estrategia de los conservadores pasa por no adelantar todos sus planes porque generarían rechazo entre muchos votantes de perfil centrista y por ello esconden parte de sus pretensiones, amparados en encuestas coyunturalmente ventajosas.
Pero la evidencia en la entrevista concedida al diario “El País”, acentúa las pretensiones de recortes sociales y tijeretazos a lo público. Que mala práctica para un país democrático con más de 30 años de andadura y progresos sociales, revisar conquistas de los ciudadanos/as retrocediendo en avances sociales que consolidan el estado del bienestar, por el mero hecho de haber sido puestas en marcha por gobiernos socialistas.
Parece que lo único que preocupa a Rajoy y sus acólitos es derogar la Ley del Matrimonio Homosexual, la Ley del aborto, no aplicar la ley de Igualdad, en resumen retroceder en conquistas sociales, y sobre todo llegar a la Moncloa a costa de la crisis y el sufrimiento de muchas familias con problemas por la lacra del paro.
Cuando se profundiza en su discurso, como siempre, las respuestas son no lo sé, ya veremos, etc. es decir indefinición e improvisación. Pero en el tema económico es mucho más preocupante el planteamiento, todo pasa por oponerse a los planes del gobierno socialista pero sin clarificar una sola medida económica, que además en algunos casos son las que gobiernos europeos del mismo signo ideológico, están desarrollando.
Y en este aspecto llega el planteamiento más preocupante del Sr. Rajoy, cuando se refiere a las medidas del Gobierno conservador del Sr. Cameron en el Reino Unido, que apoya y defiende.
Conviene recordar que los tories británicos han anunciado un plan que entre otras cuestiones para paliar el déficit público están decididos a vender bosques públicos al considerar que los montes son “el mayor patrimonio del Estado”. También la eliminación de quinientos mil empleos públicos, el aumento de las tasas universitarias, más trabas para conseguir viviendas sociales y otras drásticas medidas.
Pues bien el Sr. Rajoy líder de la oposición y líder de oponerse a todo lo que hace el gobierno para llegar a la Moncloa, le parece bien este plan, imagínense lo que supondría en nuestro país estas cuestiones, sólo podrían actuar las grandes fortunas y la clase alta que no tiene problemas económicos, el resto ya sabemos, menos becas, menos educación, menos sanidad, menos viviendas sociales, en resumen más diferencias sociales.
Esta es la receta escondida de la derecha en nuestro país y la falsa defensa de la clase trabajadora que propugnaban hace unas fechas.
Para provincias como la de Segovia, con más de la mitad de la superficie declarada forestal, aplicar la receta que apoya Rajoy, del gobierno conservador del Reino Unido de venta de bosques públicos, tendría "un efecto desastroso para el medio ambiente, para la economía y, en general, para la sociedad que se beneficia de las externalidades que nuestros bosques generan, como la regulación del ciclo hidrológico, la calidad de las aguas, la lucha contra la erosión, el valor como sumideros de carbono y mitigador del cambio climático, el valor turístico, recreativo, cultural, en resumen las señas de identidad de todo un pueblo y de sus habitantes. Evidentemente se pueden valorar económicamente los montes, y los cálculos realizados arrojan cifras que asustan pero creo con rotundidad que probablemente, constituyen el patrimonio más importante que tiene el Estado y la sociedad, sin despreciar el valor creo que lo más valioso son los beneficios indirectos o no tangibles. Que sería de profesiones como los resineros, gabarreros, cuberos, piñeros o de actividades como la caza, las setas, la pesca, y un largo etcétera.
La única fórmula para ofrecer garantías, a las generaciones futuras en cuanto a los beneficios medioambientales de nuestros bosques, es mantener la propiedad pública de los mismos y la propuesta de la derecha es contraria a ese espíritu de futuro y de progreso.
Claro nos dimos cuenta que la estrategia de los conservadores pasa por no adelantar todos sus planes porque generarían rechazo entre muchos votantes de perfil centrista y por ello esconden parte de sus pretensiones, amparados en encuestas coyunturalmente ventajosas.
Pero la evidencia en la entrevista concedida al diario “El País”, acentúa las pretensiones de recortes sociales y tijeretazos a lo público. Que mala práctica para un país democrático con más de 30 años de andadura y progresos sociales, revisar conquistas de los ciudadanos/as retrocediendo en avances sociales que consolidan el estado del bienestar, por el mero hecho de haber sido puestas en marcha por gobiernos socialistas.
Parece que lo único que preocupa a Rajoy y sus acólitos es derogar la Ley del Matrimonio Homosexual, la Ley del aborto, no aplicar la ley de Igualdad, en resumen retroceder en conquistas sociales, y sobre todo llegar a la Moncloa a costa de la crisis y el sufrimiento de muchas familias con problemas por la lacra del paro.
Cuando se profundiza en su discurso, como siempre, las respuestas son no lo sé, ya veremos, etc. es decir indefinición e improvisación. Pero en el tema económico es mucho más preocupante el planteamiento, todo pasa por oponerse a los planes del gobierno socialista pero sin clarificar una sola medida económica, que además en algunos casos son las que gobiernos europeos del mismo signo ideológico, están desarrollando.
Y en este aspecto llega el planteamiento más preocupante del Sr. Rajoy, cuando se refiere a las medidas del Gobierno conservador del Sr. Cameron en el Reino Unido, que apoya y defiende.
Conviene recordar que los tories británicos han anunciado un plan que entre otras cuestiones para paliar el déficit público están decididos a vender bosques públicos al considerar que los montes son “el mayor patrimonio del Estado”. También la eliminación de quinientos mil empleos públicos, el aumento de las tasas universitarias, más trabas para conseguir viviendas sociales y otras drásticas medidas.
Pues bien el Sr. Rajoy líder de la oposición y líder de oponerse a todo lo que hace el gobierno para llegar a la Moncloa, le parece bien este plan, imagínense lo que supondría en nuestro país estas cuestiones, sólo podrían actuar las grandes fortunas y la clase alta que no tiene problemas económicos, el resto ya sabemos, menos becas, menos educación, menos sanidad, menos viviendas sociales, en resumen más diferencias sociales.
Esta es la receta escondida de la derecha en nuestro país y la falsa defensa de la clase trabajadora que propugnaban hace unas fechas.
Para provincias como la de Segovia, con más de la mitad de la superficie declarada forestal, aplicar la receta que apoya Rajoy, del gobierno conservador del Reino Unido de venta de bosques públicos, tendría "un efecto desastroso para el medio ambiente, para la economía y, en general, para la sociedad que se beneficia de las externalidades que nuestros bosques generan, como la regulación del ciclo hidrológico, la calidad de las aguas, la lucha contra la erosión, el valor como sumideros de carbono y mitigador del cambio climático, el valor turístico, recreativo, cultural, en resumen las señas de identidad de todo un pueblo y de sus habitantes. Evidentemente se pueden valorar económicamente los montes, y los cálculos realizados arrojan cifras que asustan pero creo con rotundidad que probablemente, constituyen el patrimonio más importante que tiene el Estado y la sociedad, sin despreciar el valor creo que lo más valioso son los beneficios indirectos o no tangibles. Que sería de profesiones como los resineros, gabarreros, cuberos, piñeros o de actividades como la caza, las setas, la pesca, y un largo etcétera.La única fórmula para ofrecer garantías, a las generaciones futuras en cuanto a los beneficios medioambientales de nuestros bosques, es mantener la propiedad pública de los mismos y la propuesta de la derecha es contraria a ese espíritu de futuro y de progreso.
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